SE NOS FUE LA MÁS GUAPA
Recién cumplidos los 11 años Ultra Lady hija de Guadamecil Peaceful y Bannside Where Art Thou, criada por Alberto Rodríguez y su familia en Asturias, nos dejó, completamente invadida de tumores malignos que incluso la impedían tumbarse en su "sofá". El 17 de marzo de 2017, te quedaste dormida para siempre, las manos y espíritus de Maripepa, Beatriz y por supuesto míos, te acompañaron en el primer paso de lo que nuestros compañeros dicen el puente del Arco Iris, esperamos que el Papa Francisco tenga razón y nos encontremos allí donde estés.
El título
de la carta a tu querido Chede, que era tu tío abuelo, aquél que te acompañó
tanto tiempo y con el que lo pasaste tan bien, pues bien el titulo decía “La
muerte puede esperar”, aquél título era del todo “literario”, pero el de este
escrito es del todo cierto, eras la perra más guapa que ha pasado por nuestra
casa, tus ojos a pesar de ser pequeños, eran tan grandes y profundos que era
difícil abstraerse de ellos, su expresión cautivaba a todo el mundo,
curiosamente incluso a aquellas personas que ni siquiera les gustan los perros
su exclamación era la misma "¡qué perra más guapa!".
Un día comenté entre compañeros, que como se podía tener tanta belleza y a la
vez ser tan "cabrona" , tú eras el referente, el ejemplo, ¡qué carácter!.
Te has ido y nos has dado algo más de "libertad", pues no queríamos dejarte sola
en ningún momento, pero te has llevado gran parte de nuestro ser como "perreros"
y como personas que aunque entendemos y asumimos que sois perros, os
consideramos como parte indivisible de nuestras vidas, y sobre todo aquellos que
como tú dejas una impronta de carácter y dulzura a la vez.
Contigo no
se podía quedar a "medias tintas". Aún me resuena tu voz avisando de que dentro
de casa había alguien custodiándola, molestando incluso a propios y extraños
cuando alguien llamaba al timbre o al "porterillo" de la calle.
No sé donde te venía tu condición de "meteoróloga" a todos nos avisabas un buen
rato antes de que iba a llover, aunque fueran cuatro gotas, y la expresión que a
veces oías "a recoger la ropa que va a llover", no fallaste ni una sola vez en
11 años. Simplemente maravillosa.
No quiero
dejar pasar el gran esfuerzo que Maripepa ha hecho para que pudieras estrenar el
"sofá" que te confeccionó antes de marchar para siempre. Han sido muchas
madrugadas cosiendo, midiendo, descosiendo y vuelta a coser, pero ¿sabes?, has
sabido agradecer tanto esfuerzo, pues lo adoptaste y lo defendiste desde el
primer momento, buenos ratos has echado con la manta hasta la cabeza, dejando
ver tus maravillosos ojos, o tus ejemplares pies.
En casa y en el campo que tanto disfrutamos vivimos la naturaleza en su estado
puro, corriste como una loca se te veía disfrutar en las charcas y ríos cuando
salíamos a la sierra y no digamos en el mar… También te gustaban las piscinas
artificiales, aunque en la última te tuve que llevar como a niño pequeño.
Hay una frase de Abraham Lincoln que puse en la despedida a Chede, y que dejaré
para ti también, "al final lo que importa no son los años de la vida, sino la
vida de los años”
Hasta luego "Leidi"